Financiar plan de cuidados a largo plazo
Financiar plan de cuidados a largo plazo Documentos y finanzas
Solicita entrevistas con al menos tres profesionales. Si no te ofrecen una consulta inicial gratuita, táchalos de la lista. Llega a la cita con un cuestionario. ¿Qué servicios ofrece? ¿Qué títulos, licencias o habilidades posee? ¿Cuál es su especialidad? Asegúrate de comprender cómo cobra por sus servicios. Los profesionales de las finanzas suelen cobrar según distintos criterios: por hora, según una tarifa plana, un porcentaje de los bienes administrados o a comisión. Ten presente que algunos profesionales que cobran comisiones, probablemente, no se preocupen demasiado en actuar en defensa de tus intereses. Ve si te sientes cómodo con el profesional. A un buen profesional financiero no le molestan las preguntas y puede dar respuestas claras. Solicita referencias de clientes y verifícalas. ¿Cuánto tiempo han usado los servicios de estas personas? ¿Qué es lo que más les gustó y lo que menos les gustó de ellos? ¿Se los recomendarían a un pariente? Verifica sus credenciales con el organismo regulador o habilitador pertinente. Lo puedes hacer a través de las asociaciones profesionales y las agencias que otorgan las licencias. Recuerda que estás contratando a alguien para ayudarte a planificar tu futuro. Deja la timidez a un lado. Para obtener más información sobre cómo trabajar con un profesional financiero, visita .
Contrata a un profesional para financiar tu plan de cuidados a largo plazo
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En vista de la variedad de estrategias existentes para financiar los cuidados a largo plazo, a muchas personas les resulta útil consultar a un profesional financiero. Es importante saber qué tipo de profesional satisfará tus necesidades y cómo encontrar a alguien en quien confiar. Puedes obtener una lista con los datos de varias organizaciones que te pueden ayudar a encontrar un profesional adecuado, en la sección de recursos de la "" de la biblioteca virtual de AARP, AARP’s Digital Newsstand, o también puedes solicitar una copia de la guía llamando al 1-888-OUR-AARP. Recibe contenido similar, Los planificadores financieros evalúan cada aspecto de tu vida financiera, que incluye tus ahorros, inversiones, seguros, impuestos y planificación de la jubilación y del patrimonio hereditario, para hacerte recomendaciones sobre cómo lograr tus objetivos financieros. Los asesores en inversiones se centran, específicamente, en administrar tus inversiones. Para encontrar información sobre asesores, visita , (en inglés). Los agentes de seguros pueden ayudarte a analizar las distintas opciones de seguro de vida, anualidades y seguro de cuidados a largo plazo. Puedes encontrar agentes a través de la comisión de seguros de tu estado. Los abogados especializados en planificación patrimonial pueden preparar documentos legales, tales como un testamento, un poder notarial para asuntos financieros o directivas anticipadas. También pueden elaborar estrategias para que la sucesión del patrimonio hereditario sufra la menor carga fiscal posible. Sea cual sea el tipo de profesional que elijas, deberás hacer tu propia investigación antes de decidirte a contratar uno. Comienza por pedir referencias a tus parientes, amigos y colegas. También, como punto de partida, puedes consultar los sitios de internet en la sección de recursos de la "Guía de recursos para cuidados a largo plazo".Solicita entrevistas con al menos tres profesionales. Si no te ofrecen una consulta inicial gratuita, táchalos de la lista. Llega a la cita con un cuestionario. ¿Qué servicios ofrece? ¿Qué títulos, licencias o habilidades posee? ¿Cuál es su especialidad? Asegúrate de comprender cómo cobra por sus servicios. Los profesionales de las finanzas suelen cobrar según distintos criterios: por hora, según una tarifa plana, un porcentaje de los bienes administrados o a comisión. Ten presente que algunos profesionales que cobran comisiones, probablemente, no se preocupen demasiado en actuar en defensa de tus intereses. Ve si te sientes cómodo con el profesional. A un buen profesional financiero no le molestan las preguntas y puede dar respuestas claras. Solicita referencias de clientes y verifícalas. ¿Cuánto tiempo han usado los servicios de estas personas? ¿Qué es lo que más les gustó y lo que menos les gustó de ellos? ¿Se los recomendarían a un pariente? Verifica sus credenciales con el organismo regulador o habilitador pertinente. Lo puedes hacer a través de las asociaciones profesionales y las agencias que otorgan las licencias. Recuerda que estás contratando a alguien para ayudarte a planificar tu futuro. Deja la timidez a un lado. Para obtener más información sobre cómo trabajar con un profesional financiero, visita .